Fuente: Cortesía de Pexels, Thirdman
Vivimos en un mundo digital; no hay escapatoria. Estar constantemente conectado puede afectar nuestras relaciones de varias maneras. Por un lado, puede mantenernos conectados a nuestras redes sociales, pero por otro lado, puede alejarnos del momento presente y de las relaciones en tiempo real.
Lo que dice la investigación sobre la «tecnología»
Los investigadores Brandon McDaniel y Sarah Coyne acuñaron el término tecnoferencia, que describe situaciones en las que la tecnología crea interrupciones en las interacciones de pareja o el tiempo que pasan juntos. Un estudio que publicaron en 2016 encontró que los participantes percibían que los dispositivos tecnológicos afectaban sus relaciones. Aquellos que informaron más tecnoferencia en sus relaciones también informaron mayor conflicto sobre el uso de la tecnología, menor satisfacción en la relación, más síntomas depresivos y menor satisfacción con la vida.
Una distinción importante es entre la tecnología utilizada para facilitar la conexión entre los miembros de una pareja y la que impide esas interacciones. Es importante tener esto en cuenta porque otras investigaciones han demostrado que enviar mensajes de texto, por ejemplo, puede mantener a las parejas conectadas durante el día.
Con respecto a los mensajes de texto, la investigación de Jonathan Pettigrew (2009) ha descrito que la tecnología tiene aspectos tanto de «empuje» como de «atracción». El impulso es que la tecnología empuja a las personas a comunicarse entre sí en entornos en los que de otro modo sería difícil o imposible (es decir, una sala de cine). Sin embargo, la tecnología atrae a una persona a diferentes contextos, sacándola de su entorno inmediato y de posibles interacciones en persona. En ese sentido, la gente puede no estar completamente presente.
Cómo las parejas usan la tecnología en la vida diaria
Considere dos parejas: Amy y Sean, y Dan y Nina.
Amy y Sean se envían mensajes de texto a lo largo del día para compartir que están pensando el uno en el otro. Ocasionalmente, enviarán recordatorios por mensaje de texto, como sobre artículos para agregar a la lista de compras o sobre cómo recoger la ropa de la tintorería. Sin embargo, la mayoría de sus intercambios se centran en su conexión como pareja. Cuando están en casa, se aseguran de tener cenas libres de tecnología para que puedan hablar sobre su día.
Dan y Nina, por otro lado, suelen usar la tecnología como escape. Realmente no usan sus teléfonos durante el día, ya que están ocupados con el trabajo. Tienden a recogerlos en la mesa de la cena o cuando miran televisión juntos al final de la noche para ponerse al día con los correos electrónicos o consultar las redes sociales.
La primera pareja, Amy y Sean, usan la tecnología para conectarse, mientras que Dan y Nina la usan como escape. Claro, es posible que no se escapen intencionalmente, pero la atracción hacia los correos electrónicos y las redes sociales los está sacando de su relación actual.
Si bien las redes sociales pueden ser una excelente manera de conectarnos con aquellos que no hemos visto en mucho tiempo y mantenernos en contacto con familiares, compañeros de trabajo y amigos, pueden tener algunos efectos secundarios negativos, especialmente cuando se trata de nuestras vidas románticas. Sea consciente de cómo usa las redes sociales, tanto en términos de la cantidad de tiempo que pasa en ellas como de cómo elige interactuar con su pareja al usarlas.
Comentarios recientes