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Fuente: Yan Krukov/Pexels

Fuente: Yan Krukov/Pexels

En un mundo laboral dominado por la automatización, la digitalización y una falta de civismo cada vez mayor, la necesidad de las fortalezas de los «luchadores sensibles» neurodiversos nunca ha sido mayor.

Un «luchador sensible» es un empleado que es a la vez muy sensible y de alto rendimiento. Su empatía, inteligencia emocional y nivel superior de percepción y perspicacia ofrecen una ventaja competitiva innegable en la futura fuerza laboral. De hecho, el Informe sobre el futuro de los empleos del Foro Económico Mundial dice que para 2025, las habilidades que ejemplifican los «luchadores sensibles», como el pensamiento crítico, la resolución de problemas, la autogestión, el trabajo bien con las personas y la comunicación, serán más importantes. preguntar.

El valor empresarial de los «conductores sensibles»

Una de cada cinco personas ha heredado un conjunto especial de genes que conduce a tener un sistema nervioso central altamente sintonizado. La psicóloga Elaine Aron, quien descubrió por primera vez el rasgo de la alta sensibilidad, sugirió que evolucionó como una «estrategia de supervivencia innata» para mantenerse libre de daños en tiempos prehistóricos. Hacer una pausa y observar, un sello distintivo de la alta sensibilidad, ayudó a estas personas a tomar decisiones acertadas al captar las señales ambientales y reconocer cosas que las personas menos sensibles no sabían.

La neurodiversidad que viene con una alta sensibilidad sigue siendo un rasgo invaluable: los gerentes constantemente califican a las personas con estas habilidades como sus principales colaboradores. Los estudios también han demostrado que debido a su cableado único, las personas sensibles tienen circuitos mentales más activos y más neuroquímicos en áreas relacionadas con la atención, la planificación de acciones, la toma de decisiones y la empatía.

La profundidad de procesamiento mental de los «luchadores sensibles» significa que reciben más información, la sintetizan y la procesan de una manera más compleja. Exploran varios ángulos y caminos para encontrar una solución y buscan constantemente mejoras. Es probable que los «luchadores sensibles» ofrezcan sugerencias novedosas e inventivas o resalten las lagunas antes de que se conviertan en problemas, lo que puede ahorrar tiempo y dinero. Su conciencia natural significa que su trabajo es consistentemente minucioso y profesional. Los «luchadores sensibles» también son deliberados con sus acciones, equilibran diferentes perspectivas y se comunican con tacto incluso cuando hay presión.

Cómo las organizaciones pueden adoptar la neurodiversidad

En los últimos años, ha habido un movimiento para adoptar la neurodiversidad en el lugar de trabajo o crear valor en sus variaciones normales y no patológicas en el funcionamiento mental. Por lo general (y con razón) se ha dicho que la neurodiversidad promueve la inclusión de las personas con autismo y TDAH. También se aplica a la alta sensibilidad, dado que el rasgo conduce a diferencias neurológicas en alrededor del 20 por ciento de los trabajadores.

Aceptar a los «luchadores sensibles» presenta una gran oportunidad para transformar el liderazgo, los ingresos y el impacto de su organización. Las empresas y los equipos de alto rendimiento requieren una combinación de personalidades, por lo que cuando los «luchadores sensibles» encuentran roles y lugares de trabajo en los que pueden prosperar, todos ganan.

Aquí le mostramos cómo promover una mayor neurodiversidad en su empresa y aprovechar al máximo a los «luchadores sensibles» de su equipo mientras lo hace:

1. Adaptar el proceso de entrevista.

El proceso de entrevista tradicional tiende principalmente a evaluar y sobrevalorar las habilidades duras, como el análisis de datos, la experiencia en software o las habilidades de gestión de proyectos. Si bien muchos «luchadores sensibles» son técnicamente dotados, es posible que se pierda a los mejores candidatos si no explora las diferencias cerebrales. Y al hacerlo, sesga su proceso para eliminar a los «luchadores sensibles» que podrían transformar su organización. ¿Cómo puede adaptar su proceso de entrevista?

  • Incluya preguntas que evalúen el nivel natural de sensibilidad de un candidato. Por ejemplo, pregunte sobre el proceso de pensamiento detrás de una decisión importante en su último rol. La evidencia de que el candidato hizo una pausa antes de actuar, tomó en consideración varios escenarios y reflexionó sobre sus experiencias pasadas sugiere que tiene un «esfuerzo sensible».
  • Ofrezca asignaciones razonables de entrevistas para llevar a casa. Los estudios de casos breves y de alto nivel, las presentaciones o las tareas de prueba le brindan la oportunidad de evaluar la creatividad y la comunicación de un candidato. Los «luchadores sensibles» prosperan cuando tienen la oportunidad de contemplar y reflexionar en lugar de responder en el acto.

2. Cree un entorno de trabajo bien equilibrado.

Debido a su genética, los «luchadores sensibles» se ven más afectados por su entorno, para bien o para mal. Incluso si su personal trabaja desde casa, el impacto de la cultura de su lugar de trabajo puede trascender las paredes físicas. Para crear un entorno bien equilibrado:

  • Modele un sólido equilibrio entre el trabajo y la vida al definir claramente las horas de trabajo y los tiempos de respuesta esperados. Los «luchadores sensibles» tienden a estar tan comprometidos que trabajan demasiado, por lo que es crucial fomentar el tiempo libre.
  • Cree oportunidades para un procesamiento más profundo al normalizar los días sin reuniones y el uso de «No molestar» en las aplicaciones de mensajería de trabajo, por ejemplo. Obtendrá una mayor productividad y calidad de trabajo de todo su equipo, pero especialmente de sus «luchadores sensibles».

Lecturas esenciales sobre neurodiversidad

3. Integre la autoconciencia en el estilo de trabajo de su organización.

La alta sensibilidad está vinculada a un gen que aumenta la viveza de las experiencias internas. Estar más emocionalmente en contacto hace que los «luchadores sensibles» sean muy conscientes de sí mismos, y los trabajadores conscientes de sí mismos son más efectivos. Tome prestado el enfoque del mundo de los «luchadores sensibles» y haga que su organización sea más exitosa integrando la autoconciencia en su estilo de trabajo. Así es cómo:

  • Las personas deben desarrollar un “manual de usuario”, que es un documento que describe sus mejores condiciones de trabajo; cómo prefieren comunicarse, recibir comentarios y tomar decisiones; cómo aprenden mejor; y las cosas con las que luchan. Esto ayuda a los equipos neurodiversos a comprender los estilos de trabajo de los demás y, a su vez, trabajar de manera más armoniosa entre sí.
  • Educar a los gerentes y líderes con capacitación sobre las diferencias de personalidad normales. La aceptación y el aprecio de los «luchadores sensibles» tienen que venir desde arriba.

En última instancia, defender la neurodiversidad consiste, en parte, en cambiar la narrativa en torno a la sensibilidad de una que ve la cualidad como una debilidad a una que la anuncia como la superpotencia que es.