La paternidad es cuando un niño se ve obligado a desempeñar el papel de un adulto. Se presiona a muchos niños para que desempeñen el papel de cuidadores de sus hermanos menores o se conviertan en árbitros en las discusiones de sus padres. Cuando los cuidadores no pueden dar un paso adelante, los niños se encuentran en situaciones inapropiadas para su desarrollo.
La parentificación ocurre en un espectro y existen diferentes niveles de lesión que pueden desarrollarse. También hay cualidades que vienen con la parentificación que pueden beneficiarlo en ciertas áreas de su vida, como ser un líder o un gran cuidador. No todo está mal, pero puede volverse catastrófico para un niño y para él como adulto. Tenemos que encontrar el equilibrio adecuado entre responsabilidad y estructura, juego y diversión.
Los niños que han sido criados por sus padres a menudo necesitan trabajo infantil interior. Por lo general, tienen dificultades para divertirse y se sienten atraídos fácilmente al papel de guardianes. Su valor a menudo está directamente relacionado con lo que pueden aportar a los demás y con su «calidad». Por lo general, la estructura les parece más segura que jugar o improvisar.
Señales de que fuiste criado cuando eras niño
Si te identificas con alguno de los signos de esta lista, puede ser útil que te pongas en contacto con tu niño interior y te permitas experimentar esa parte de ti. La parte lúdica del niño interior suele ser la parte que se ve abrumada por la parentificación. Esta parte quiere divertirse de forma espontánea y vivir sin culpa ni ansiedad.
Cómo ponerse en contacto con su niño interior
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Tomar conciencia. Acepta que tienes un niño interior y conócelo. Debes tomar esa voz en serio y comprender que, te guste o no, está ahí.
- Conoce las necesidades de tu niño interior. Muchos niños crecen aprendiendo que sus necesidades no son grandes o que tienen que ser aplastados para poder sobrevivir. Escucharse a sí mismo y reconocer sus necesidades puede ser un concepto completamente extraño. Lo que no recibimos de nuestros tutores cuando éramos niños es a menudo exactamente lo que necesitamos.
- Asume la responsabilidad. Es realmente difícil. Tienes que reconocer el dolor de no haber satisfecho las necesidades de tu infancia. Tienes que admitir que no fue justo y que dolió. Ahora eres el adulto que lucha con la responsabilidad de volver a ser padre. Es bueno decir que no fue justo y desear que fuera diferente. Pero la única forma de avanzar es decir: «Partiré de aquí. Soy mi propio héroe. No tengo que vivir de esa manera».
- Conviértete en padre y amigo de tu niño interior. Haga un balance de lo que no recibió cuando era niño y de las necesidades que aún deben satisfacerse. Esto es diferente para todos. Quizás no tenías una estructura cuando eras niño, así que la necesitas ahora. Quizás tenías demasiada estructura cuando eras niño y ahora necesitas libertad.
- Encuentre una manera de honrar constantemente a su niño interior. A continuación se muestra una lista de cosas que su niño interior podría necesitar.
Cosas que su niño interior podría necesitar y cómo proporcionarlas:
Estructura: cree una estructura en su día a través de una rutina, un horario o una hora establecida para acostarse o despertarse. Involúcrate en las cosas y hazlo. Los niños que fueron criados a menudo se vieron obligados a crear una estructura para otros o ignoraron sus propias necesidades para mantener el status quo. Encuentre una manera de crear una estructura que sea significativa para usted y que sienta segura.
Juego y libertad: agregue momentos de juego seguros a su vida. Salga a correr, recuéstese en el césped o tome una clase en el gimnasio. Haz algo que te haga sentir vivo.
Comunidad: encuentre formas de conectarse con las personas que le rodean. Busque personas que compartan los mismos valores y le permitan ser usted mismo. Trate de establecer límites en torno a las relaciones que lo desgastan.
Amor y refuerzo positivo: habla con amabilidad contigo mismo y pasa tiempo con personas que hacen lo mismo. Siempre que te critiques a ti mismo, responde tres cosas buenas. Establezca un momento en su día para demostrar su amor.
Seguridad y protección: cree un espacio al que pueda ir y sentirse seguro. Cree seguridad en su vida priorizando su propia salud financiera y la salud de su espacio físico. Crea y respeta tus límites alrededor de tu espacio.
Salud emocional: permítase sentir y experimentar emociones. Recuerda que tus sentimientos son reacciones normales y tienes el poder de decidir qué quieres hacer con ellos.
Te desafío a hacer una cosa todos los días para volver a criar a tu niño interior. Eche un vistazo a las seis áreas anteriores y decida cuál necesita más atención en su vida. Luego, proponga una tarea simple que pueda hacer a diario para honrar una de estas áreas.
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